REQUISITO PARA LEER: Mírala... espera, no estoy seguro. Mi lado bueno intenta decirme que no sea malvado con este título, pero mi lado de 24 años me exige que sí, que Márgenes tiene otras pelis mejores. Jaja... es broma. Si puedes, mira este filme y saca tus conclusiones, lector. Qué sé yo, tal vez te gusta y te animes a hacer una segunda parte.
Bueno, acá hay dos aristas. En primera, la directora se mata y remata por mostrarnos su ruta personal para seguir la huella de Harold E. Edgerton, ingeniero electrónico y creador del destello (flash) de las cámaras. Se explica un poco de esto último, de manera resumida, y queda bien. En segundo lugar, a modo de enseñanza, se recrean estancias interiores de lo que imagino sería la idea de la directora, llamémosle por su nombre, Teresa, de ese encanto que esconde Edgerton, que ella anhela conocer. La película es rara, con un mensaje o regularmente construido o tan complejo que mi mente no alcanzó a descifrar. Y con todo el cariño que le tengo a este festival, debo que esta vez si hubo un yerro en lo que se podía abarcar. Teresa Solar Abboud consiguió momentos esbeltos, encaminados eh, pero con el final terminó ella solita por descarrilarse (o, lo que también puede ser, no estoy en capacidad todavía de entender sus mensajes).
Me quedé fascinada.
¿Saben? El llamado hipster usa y abusa de cosas anticuadas, ¿no? Pues existe no sólo en la moda, sino también en los contenidos. Algo como lo que maldijo el personaje de Jorge Pellegrini en El mismo amor, la misma lluvia (1999) al ver su cuento tan esmerado convertido en un cortometraje, sobre el cual dice «un turro hizo la iluminación, y un borracho hijo de puta la cámara». Y queda mejor que bien lo que el director de ese truño alega «el arte no lo podés explicar, lo entendés, bien; no lo entendés, bien; te gusta, bien; no te gusta, bien; lo sentís, bien; y no lo sentís, bien; se terminó el debate». Ahí tienen lo que ocurre cuando... ¿cómo es? Mucho abarca el que poco aprieta. Exacto. Y esta tía, Teresa (porque es española eh), patinó en lo que podía haber sido un filme experimental alturado y complejo. Porque es complejo eh, pero tanto que vuela más allá del ritmo y el hilo conductual.